Las personas continuamente estamos manifestando múltiples emociones, nos encontramos con más de una emoción todos los días. La frustración, la alegría, la ira, la tristeza, la culpa, etc. En cualquier caso, es importante recordar que este proceso por el que estás pasando es temporal y por tanto, tarde o temprano terminará. Eso incluye, por supuesto, el hecho de estar triste.
Debemos tener en cuenta que cuando estamos tristes nuestra percepción de las cosas cambia, y por lo general, se tienden a ver de forma más pesimista. Por eso, te recomiendo que tengas cautela a la hora de tomar decisiones, y, que establezcas el menor número de juicios posibles, sobre las situaciones que estás viviendo.
¿Cómo saber si pasamos mucho tiempo estando tristes?
Tenemos que fijarnos si esa tristeza ha tenido un desencadenante directo, alguna experiencia concreta y reciente que lo explique, esto suele ser lo más habitual. Cuando ya vemos que la tristeza viene con cierta frecuencia, que cuesta distraerse o cuesta desconectar de ella, es cuando debemos prestarle especial atención porque puede que ya esté empezando a interferirnos en nuestra vida.
Puede que llegue un momento en el que la tristeza venga sin ninguna razón aparente, y poco a poco puede irse convirtiendo en un estado de desmotivación general, pérdida de interés por diversas actividades y cansancio.
Estoy triste mucho tiempo, ¿tendré depresión?
No tiene por qué, la tristeza es uno de los diversos síntomas que encontramos en una depresión pero no es suficiente como para tener ese diagnóstico.
Si quieres conocer más sobre los criterios para diagnosticar el Trastorno Depresivo Mayor, te dejamos este enlace https://carlamelian.com/blog/lo-que-necesitas-saber-sobre-depresion
Estrategias para utilizar cuando estés triste
Una de las recomendaciones más valoradas e útiles es la expresión tanto verbal como escrita:
1. Expresión emocional. Esta recomendación es especialmente importante porque toda emoción que no se manifieste y sea reprimida tenderá a generar frustración, ya que no nos permitimos manifestar lo que estamos sintiendo. Por lo que nuestro cuerpo puede que transforme esa energía en forma de nervios, ansiedad o estrés. Con lo que si intentamos postergar o directamente eliminar ese sentimiento, puede que lo consigamos sí … Pero, ¿a qué precio?, estamos generando más carga. Si, por el contrario, dejo expresar lo que siento, por ejemplo, si es tristeza y tengo ganas de llorar, si me permito llorar, estaré siendo congruente y mi cuerpo y mi mente notarán ese alivio una vez has descargado. Por lo que, ese proceso de malestar terminará antes, que si lo arrastramos en forma de ansiedad.
2. Expresión verbal. Buscar apoyo puede acortar ese estado de tristeza, y además, el proceso será más llevadero acompañado de las personas que tú elijas. Ellos te ayudarán a ver diferentes perspectivas sobre el problema que probablemente ahora no estés viendo, y podrán ayudarte a regular tus emociones gracias a la comprensión y relajación que pueden transmitirte.
No tengas miedo de usar ese apoyo que sabes que tienes, ¡no se desgasta!. Al contrario, puede reforzarse el vínculo.
3. Expresión escrita. En el caso de que decidas la opción más reservada contamos con la expresión o desahogo sobre el papel o pantalla. Esta estrategia nos permite expresar lo mismo que haríamos con las personas en la tranquilidad de nuestro refugio personal. Ayuda a exponer las ideas que tengamos, a desahogar tanto en prosa como emocionalmente lo que sentimos. Puede que, incluso, nos resulte más sencillo analizar y tomar decisiones. Una vez tomemos distancia de las emociones y estemos relajados podemos releer el escrito e interpretarlo de otra forma seguramente más adaptativa ya que estaremos libres del intenso flujo emocional.
Si tienes alguna pregunta sobre este tema, no dudes en consultar. Si no sabes por qué sueles estar triste, o no sabes cómo dejar de estarlo. ¡Pide ayuda! Para eso estamos 🙂