Puedes permitirte tener un mal día

Muchas veces nos ponemos cientos de máscaras, y lo hacemos día tras día. A veces se hace muy complicado sostener una cara sonriente en un día triste. ¿Y si aceptamos que sencillamente hay días en los que no estamos bien? ¿y si te dijéramos que puedes permitirte tener un mal día y te lo argumentáramos?

¿Por qué queremos hablarte sobre tener un mal día?

Queremos hablarte sobre este tema porque parece que actualmente no podemos permitirnos estar mal. Se nos vuelve complicado en una sociedad donde todo tiene que ser perfecto, impecable, donde no existe espacio para el «error» o lo «socialmente no aceptado».

Claro, el problema es que no permitirnos expresar ciertas emociones y manifestar determinados sentimientos, y eso nos carga y y nos puede lacrar. Una sonrisa constante, forzada por la presión social, puede ser contraproducente a largo plazo. Es un tema importante del que no se habla demasiado, pero con este episodio esperamos que, al menos, te ayudemos a reflexionar sobre ello.